Autoridades, Señoras y Señores, Todos aquí presentes:
Tengo el honor de dirigirme a Ustedes en nombre de la Sociedad Agronómica de Chile, una vez más, en calidad de Presidente.
Quisiera, agradecer a la Universidad de CHILE, específicamente a la Facultad de Ciencias Agronómicas, el desafío de organizar el Sexagésimo quinto Congreso Agronómico de la SACH en el Campus Sur, Antumapu, donde tuve el honor de trabajar por 40 años como docente e investigador.
Los aspectos económicos, políticos y sociales han cambiado mucho desde mi inicio, y también en las Universidades, Institutos de Investigación, Ministerio de Agricultura y ni que hablar, de la misma Agricultura. En estos momentos estamos viviendo en una época en donde el conocimiento, las capacidades de los profesionales, la disponibilidad al acceso de información, son elementos imprescindibles para alcanzar un desarrollo mas pleno y armónico de las sociedades. Me refiero al mundo entero.
La investigación y desarrollo tecnológico, son dos áreas estratégicas inseparables y complementarias, competitivas tanto entre ellas, como entre los países y las empresas del sector público y privado.
Es fundamental a mi juicio, que exista una colaboración de financiamiento de proyectos por parte del sector público y privado, lo cual afortunadamente se ha logrado cada año un poco más en los últimos años.
Es necesario encontrar una justa combinación de factores que permitan lograr un conocimiento tecnológico, sea de una nueva técnica o una nueva metodología, que hace posible el cambio y modernización permanente de los requerimientos de la agricultura para distintas regiones, contribuyendo así, activamente al desarrollo, no sólo de nuestro país, sino para toda la Región. Digo esto porque en muchas ocasiones participan investigadores de Argentina. Brasil, en fin, latinoamericanos.
La innovación tecnológica es determinante en la posición relativa, de la permanencia de las empresas y de los países, en el contexto económico y social.
Todos los avances científicos están asociados a las fortalezas y necesidades de los sectores económicos involucrados, dando continuidad a las actividades de investigación para el futuro.
No se puede dejar de mencionar la cantidad de restricciones que han emanado, más bien de la salud humana y que han hecho cada vez más difícil combatir contra plagas y enfermedades, así como cumplir con las exigencias en la inocuidad de los alimentos.
La SACH, con la colaboración de las Instituciones públicas y privadas, como son las Universidades, el INIA y empresas agropecuarias han permitido y espero, que sigan colaborando con los Congresos Anuales.
Estos no sólo permiten difundir sino también intercambiar información, técnicas, procedimientos y métodos para el desarrollo de Chile en especial y en el mundo en general.
Sabemos que gran parte de las investigaciones son publicadas en el extranjero, y ahora, la mayoría queda disponible en Internet.
Así también, la SACH esta con sus revistas en Internet y “ad portas” de tener sus publicaciones en papel digital para que los usuarios puedan visualizar los trabajos presentados en los congresos pasados y venideros.
El gran número de trabajos que en este Congreso se van a presentar, son una señal que los investigadores están interesados en presentar, difundir y discutir sus resultados entre sus pares.
Sin duda, una visión integral de los desafíos, contribuye positivamente al trabajo en conjunto, que se desarrollan en el marco de este congresos, que hoy estamos inaugurando, tanto para el ámbito científico-tecnológico como productivo del sector agropecuario.
Muchas Gracias
Muchas Gracias y que todo salga bien.